Cáustica es un centro de interpretación que emerge de la topografía como un lugar de encuentro en el litoral y el malecón. Este edificio busca no solo brindar acceso al mar, sino también conectar al visitante con la esencia del lugar. Las formas curvilíneas desempeñan un papel esencial al interior del edificio, lo cual genera una narrativa visual que enlaza los diversos entornos y funciones del lugar.

Esta evolución no añade únicamente valor estético, sino que optimiza los recorridos internos y enriquece las sensaciones espaciales, lo que contribuye a tener una experiencia más enriquecedora y profunda del entorno costero y su identidad. Asimismo, los muros del edificio tienen un carácter distintivo expresado en perforaciones verticales, las cuales permiten el ingreso de luz natural al interior y, a la vez, posibilitan una conexión tangible entre el espacio interior y el paisaje exterior.