La estación de recicladores está ubicada entre las quebradas de Punta Hermosa y San Bartolo, a cierta lejanía de la zona urbana de la nueva ciudad, específicamente en la zona de industria tecnológica encargada de generar baterías de CO2 para las energías renovables de la ciudad, además de todo un proceso de reciclaje de plástico. De este modo, la estación cuenta con un sistema que aprovecha los fenómenos meteorológicos del lugar. Por ello, se propone un sólido traslúcido dentro de la tierra, con perforaciones (POROSIDAD) por la incrustación de bloques donde alguno de estos captarán la humedad del exterior, de forma que se le aproveche para el funcionamiento vital de la estación (HABITABLE).

Así surgen a partir de la ubicación de espacios internos y plataformas apoyados sobre una estructura base. También, es cubierta por una cáscara traslúcida que permite observar la ubicación de los espacios así como sus aberturas, lo que permite percibir el movimiento dentro del edificio. Asimismo, se refuerza la conexión entre la estación y el terreno por medio de rampas hacia el interior del bloque que facilitará la construcción, además se aplana cierta zona, la que genera un espacio público.